Se han acabado las tonterías. Ahora tengo que acostumbrarme de nuevo a ser yo mismo sin tener a nadie a mi lado para juzgarme e intentar cambiarme y, por supuesto, voy a rodearme de gente transparente y sin dobleces. Puedo ser serio, seco, borde, puedo ser un monstruo... Puedo ser cualquier cosa, porque las hadas se han ido al fin. Soy libre, y vuelvo a vivir con la verdad.
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4 comentarios:
Me alegro de que por fin te hayas librado de la porquería del pasado. Y más aún de haberte ayudado ;)
Y yo me alegro de que hayas sido tu quien me haya ayudado ;)
Un besazo
Me he perdido algo Francisco!? Cuentamelón!
A ver si coincidimos en el msn Daniel!!
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